Disponer de vida es ser, y para ello hay que coexistir. Pero no todos están dispuestos a asumirlo y la no aceptación se traduce con demasiada asiduidad en desprecio. Huelga decir que, ese desprecio está frágilmente sustentado en el desconocimiento y en una carencia de inteligencia emocional genuina. Es un problema de raíz, pero a menudo identificado sólo al alcanzar la violencia.
En España, están tipificados como delitos de odio diferentes ámbitos de los que destacan porcentualmente tres por incidencia: ideología ─37’3%─, racismo y xenofobia ─33’2% ─ y orientación sexual e identidad de género ─16’2%─. El cuarto hecho, aunque algo más alejado de los tres primeros, es la discriminación por sexo o género ─ 4’4%─.
Atendiendo a delitos de odio contra la orientación sexual e identidad de género, el perfil habitual del agresor es claro. En primer lugar, durante el año 2018 ─ los datos disponibles más actualizados y que probablemente hayan empeorado─, se registraron 94 detenciones o investigaciones a varones frente a las 11 por mujeres. En el resultado del conjunto de todos los delitos de odio es todavía más abrumador: 463 hombres frente a 85 mujeres. La edad más frecuente para estos ataques es de 18 a 25 años, aunque hasta los 40 años de edad existe un porcentaje nada despreciable.
¿Y qué ocurre con los menores? Destacan como agresores frente a los delitos de contra la orientación sexual e identidad de género, más que ningún otro tipificado como de odio. Exceptuando dos casos, todos los demás a manos de varones.
La diferencia entre el sexo de los agresores es clara y, además también su nacionalidad. El 79’7% corresponde a ciudadanos españoles y el 20’3% de población extranjera. No es un problema importado.
Hay que considerar que, con el avance de los tiempos, este tipo de agresiones se resuelven a partir de diferentes y nuevos medios. Los discursos del odio frente a la orientación sexual e identidad de género de las personas se proclaman con más fuerza vía Internet ─ 45’2%─ y redes sociales ─ 25’9%─. Juegan un peligroso papel en las manos de menores o jóvenes desinformados en los que pueda calar la prédica del odio a la diversidad.
Este alegato, de opresión, de limitar, de cercar la voluntad e imponer el ser ─ y por ende la existencia─ de las personas es tan ridículo como preocupante. Existen ciertas cosas que nadie puede decidir por otra persona, por ti mismo.
Cuatro de cada diez víctimas de violencia LGTBI son agredidas por personas que están en su entorno. Las «razones» rayan la necedad más solemne. Sin ir más lejos, el pasado septiembre se detuvo a un joven en Valencia por una agresión frente a otro esclareciéndose el «motivo» como que la persona agredida vestía una camisa de color rosa.
Disfrutemos todos y todas de este día (“Día del Orgullo LGTBI“) y, para las personas desinformadas que se lo cuestionan, ya celebraremos un día del orgullo heterosexual o del hombre cuando como colectivo hayamos sido vejados, oprimidos, maltratados, silenciados e incluso asesinados durante incontables años por el simple hecho de serlo.
#valenciaorgullosa
Desde nuestra ciudad, el Colectivo Lambda, ofrece y continuara ofreciendo sesiones en directo a través de la plataforma online Twitch donde se interviene en temas diversos como LGTBI fobia en aulas y escuelas valencianas, personas LGTBI en el deporte, la igualdad real de personas LGTBI en instituciones, entre otras. Como reza el eslogan de este año, Molt més que clòtxina i xufa.
Enlaces:
Ajuntament de Valencia #valenciaorgullosa: https://www.valenciaorgullosa.com/#valenciaorgullosa
Directos twitch de Lambda: https://www.twitch.tv/lambdavalencia
Página web de Lambda: https://lambdavalencia.org/es/
Fuentes: http://www.interior.gob.es/web/servicios-al-ciudadano/delitos-de-odio/estadisticas
Foto de Brett Sayles en Pexels
2 Comentarios
Pau
Molt bon article!! L’homofòbia com la resta de formes d’odi als colectius històricament maltractats i silenciats, JA NO TENEN CABUDA a la nostra ciutat!
Director
Muchas gracias Pau por leernos y por tu comentario. El equipo redactor de Malilla Digital estamos totalmente de acuerdo con él. Saludos.